Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens y revisado por Caty R. |
Como predijo M.J. Rosenberg (http://america-hijacked.com/2010/12/15/aipacs-palestinian-bashing-bill-rushed-to-floor-today) la ley Berman se aprobó abrumadoramente, en realidad por unanimidad, “porque es cómo funcionan las cosas en una ciudad donde la política está impulsada por las donaciones electorales –y no sólo por ese tema.” Agregó: “La única diferencia entre cómo dictan los lobistas de AIPAC la política estadounidense en Oriente Medio y cualquier otro lobby importante es que AIPAC trabaja para promover los intereses de un país extranjero. En otras palabras, las comparaciones con la Asociación Nacional del Rifle (NRA) sólo serían aplicables si los dueños de rifles que la NRA pretende representar vivieran en, digamos, Grecia. Oh, y las leyes patrocinadas por la NRA necesitan usualmente más de un día para llegar al hemiciclo de la Cámara.” (Énfasis agregado)
Lo que piensa y escribe Rosenberg es particularmente interesante porque a principios de los años ochenta fue editor de Near East Report, el boletín de noticias semanal de AIPAC.
Señaló que, como es usual en el caso de Berman, “su resolución culpa exclusivamente a los palestinos del colapso de las conversaciones de paz; no aparece ni una palabra de crítica a Israel”.
Sigue diciendo: “Existe un solo motivo por el cual colapsaron las negociaciones israelíes-palestinas. Es el poder del ‘lobby pro Israel’, dirigido por AIPAC, que impide que EE.UU. diga en público lo que dice en privado; que la resolución de un conflicto tan dañino para los intereses estadounidenses es constantemente bloqueada por la intransigencia del gobierno Netanyahu y su determinación de mantener la ocupación.” (Énfasis agregado)
Por ahora, dice Rosenberg, el punto básico es el dinero. “El gobierno de EE.UU. hace lo que quiere Israel porque teme poner en peligro las donaciones electorales”. Pero también da una voz al optimismo (como lo hago a veces).
“No tiene que ser así. Si el gobierno y el Congreso pusieran los intereses de EE.UU. (y de Israel) por encima de la avidez de donaciones electorales, EE.UU. podría decir al gobierno israelí que desde ahora nuestro paquete de ayuda vendrá con condiciones. Como en el caso de un préstamo del FMI (aunque la ayuda a Israel es un regalo, no un préstamo), podríamos decir que a cambio de nuestros miles de millones de dólares, nuestros vetos en la ONU de las resoluciones de crítica a Israel y nuestro silencio ante crímenes de guerra como Gaza, queremos que Israel acabe con la ocupación dentro de, digamos, 24 meses. E Israel tendría que hacerlo porque nuestra ayuda militar es, como le gusta decir a AIPAC, ‘el lazo salvavidas de Israel’.”
Quisiera que Rosenberg tuviera razón sobre cómo reaccionarían los dirigentes de Israel ante una verdadera presión estadounidense, pero estoy muy lejos de estar tan convencido como él. Como saben mis lectores habituales, pienso que existe una posibilidad, incluso una probabilidad, de que si la presión aumenta, la preferencia de los dirigentes ilusos de Israel sería decir al presidente del momento de EE.UU. (y a todo el mundo) que se vayan al diablo. Si lo harían en realidad dependería, imagino, del estado de la opinión pública (judía) israelí en ese momento. Si la mayoría de los judíos israelíes todavía tuvieran sus cerebros tan lavados por la propaganda sionista como ahora, probablemente apoyarían a los dementes que los dirigen.
Pregunta: ¿Por qué piensa que la resolución de Berman es una muestra de pánico de AIPAC?
La respuesta, en su mayor parte, está en mi último artículo “La última carta de Obama – ¿la jugará?” Mi punto principal era que como no tiene que respetar las promesas hechas a Netanyahu ya que éste no ha cumplido la congelación de 90 días de la actividad de asentamientos ilegales en Cisjordania ocupada, Obama puede abandonar la práctica presidencial de vetar las resoluciones del Consejo de Seguridad críticas con Israel.
Mi especulación es que AIPAC redactó la resolución 1734 de la Cámara y luego hizo que Berman consiguera su aprobación rápidamente porque temía que Obama pensara en instruir al embajador de EE.UU. ante la ONU para que no hubiera más vetos estadounidenses de resoluciones del Consejo de Seguridad que sean críticas con Israel y/o llamen a reconocer un Estado palestino dentro de las fronteras (previas a la guerra) de 1967.
De modo que la pregunta que espera una respuesta es – ¿obedecerá Obama las últimas órdenes del sionismo?
ACTUALIZACIÓN
Josh Ruebner es director nacional de la Campaña Estadounidense para Acabar don la Ocupación Israelí, una coalición de más de 325 organizaciones que trabajan por cambiar la política de EE.UU. hacia Israel/Palestina. En su informe para la AJPME sobre la presentación y aprobación apresurada de la resolución de Berman, explica por qué piensa que lo que sucedió es una indicación de que AIPAC “está perdiendo control”. (O como yo diría, comienza a sentir pánico).
Fuente: http://www.alanhart.net/zionist-lobbys-new-orders-for-obama/#more-1389